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7 ago 2023

La orilla de los libros



Radio Canarias, en su programa matinal «Una + una», me han invitado a participar durante el verano, en su nuevo espacio «La orilla de los libros», para hablar de educación, libros y álbumes ilustrados. Es toda una suerte tener la oportunidad en una radio pública hablar de literatura y literatura infantil. Agradecido a su directora Marlene Meneses, Mercedes Martín y María Doménech.

Y todo resultó así de bien y de fluido.

Programa 1

Programa 2

Programa 3

Programa 4

3 abr 2022

Juan Carlos Alonso, un director con conciencia.

Juan Carlos es un romántico de la educación, un idealista que no tiene reparo en utilizar términos como «amor», «transformación», «alma», «lágrimas» … cuando habla de su centro.

Tiene claro que las personas están en el centro de su acción educativa y que el amor es el impulso de las acciones que realmente transforma. También, que el profesorado es el camino, la vía y el ejemplo para conseguir los objetivos propuestos. Echa en falta que los principios, que son la base de los proyectos educativos, se hayan diluido en el «hacer» olvidándonos del «ser».

Alonso piensa «que nos hemos olvidado de la esencia». Para él es importante saber «qué tipo de ciudadanos queremos formar, a dónde queremos llegar con el alumnado y eso parece que se ha diluido, que ya no es importante, ahora lo que importa es hacer cosas…».

En ocasiones expresó que, en muchos centros, los docentes se comportan como islas y no como archipiélagos. Cada aula es un espacio único, pero en un centro educativo es, además, un lugar común. Por eso, es necesario el consenso de los valores educativos entre los maestros y maestras: «porque realmente esos valores son las raíces de nuestro árbol (…), y con lo mejor de nosotros mismos nutrir esas raíces, esos valores, y poder llegar una visión compartida de la escuela».

El centro escolar no es sólo el lugar donde los niños van a aprender. Alonso considera que también aprende el profesorado, aprenden las familias, aprende el personal administrativo y de servicios… «Y si nosotros tuviéramos esa conciencia», añade, «a lo mejor estaríamos hablando del cambio de la escuela». Sabe de la importancia de la pasión, pero también reconoce la importancia de la formación, de la perseverancia, de la serenidad y del diálogo para trazar un camino común.

Hablar con Juan Carlos es como abrir las compuertas de una presa: el agua mueve las turbinas, aparece la energía, la luz, la emoción, la vida, la pasión y la calma. Aquí te dejo el podcast:

Andy Marrero: oxígeno puro

Artículo publicado en el www.diariodegrancanaria.com


A grosso modo, las cámaras hiperbáricas sirven para llevar el oxígeno a todos los tejidos del organismo, mejorando así la circulación y por lo tanto ayudando a nuestras células a regenerarse.

Entrar en el CEIP en Arucas te crea una sensación parecida. Es un espacio dinámico, donde están sucediendo diferentes cosas a la vez; un lugar intenso y definido, un sistema que lleva el aprendizaje a todos los tejidos del centro y regenera a la comunidad entera.

Hay centros donde cada rincón o cada aula es una isla. Y otros, como sucede en el CEIP en Arucas, donde las islas conforman un archipiélago:  cada elemento es independiente, pero están comunicados unos con otros creando sinergias que impulsan la vida, que llevan el oxígeno a todo el sistema.

El corazón es el motor. El cerebro pone la intención. No sé bien en cuál de estos niveles interviene Andy Marrero, su directora. Tiene la capacidad de buscar soluciones nuevas a los problemas de siempre y creo que es eso lo que se le pide a alguien que ejerce el liderazgo educativo: tener capacidad de análisis y reflexión, ajustar las propuestas a los recursos disponibles para no crear falsas expectativas y disponer los elementos para que todos los componentes del equipo den lo mejor de sí mismo.

En ocasiones, los responsables de los centros tienden a sentirse dueños del espacio educativo que han elegido gestionar. Con el tiempo incluso, van ajustando los objetivos colectivos a sus necesidades personales, convirtiendo todo en un «proceso de adaptación» y no en un «proceso de evolución». Para estos directores y directoras sería aconsejable unas sesiones de «oxigenoterapia hiperbárica educativa».

Cuando escuchas a Andy Marrero descubres que, siendo consciente de la impronta que su personalidad ha tenido y está teniendo en el centro, se coloca de perfil, desviando toda la atención a la capacidad y la fuerza del cambio que provocan las acciones de sus compañeros y compañeras. Es un estilo educativo lleno de vida y exigente, porque sabe que el aprendizaje implica movimiento: un corazón que late y tiñe de ilusión lo que le rodea y un cerebro que impulsa y te hace mejor a su lado.

Así es Andy Marrero, oxígeno puro.

¿Quieres respirar su aire? Escucha la entrevista que le hicimos:

23 mar 2022

Víctor Bastón Alonso: cuando los silencios son importantes

Nos reunimos en un espacio público. La conversación se deslizó en un ambiente afable, entre amigos, con confianza y aderezada de una cierta alegría. Quizás, porque Víctor tiene una mirada pizpireta y la vida le hace el regalo constante del optimismo moderado: un equilibrio que aporta paz, la necesaria para afrontar los restos del futuro. Y un colegio es presente y, sobre todo, futuro.

Los centros educativos languidecen en verano, cuando los pasillos están vacíos, las aulas huecas y el eco se apodera de cada rincón, esperando el inicio de un nuevo curso. Según Bastón, la terraza en donde nos encontramos y los colegios se parecen en «la libertad, en la frescura que te da el centro, esa sensación de que siempre hay vida».

Considera que una escuela debe ser un sitio amplio, de tránsito, con bulla. Me sentí aliviado, porque el lugar en donde estábamos tenía todo eso.

La transparencia en educación es un valor esencial. Los docentes nos equivocamos. Ya he escrito en otras ocasiones que no somos héroes ni tenemos poderes que nos hacen infalibles. Es esencial que el liderazgo educativo se realice desde la perspectiva del aprendizaje. Un buen director lo sabe: reconoce sus limitaciones y descubre que el ejercicio óptimo de sus funciones pasa por saber que siempre está aprendiendo. También Víctor reconoce que la humildad es un valor que le hace ser más empático, y por lo tanto, trazar mejores objetivos.

La honestidad en la gestión implica actuar con serenidad. A pesar de la vorágine y el trasiego constante que marca una comunidad escolar, un tiempo en silencio te lleva a tomar mejores decisiones, más eficaces y con mayor resonancia. Hay que tener valor para mantener la calma en los momentos más complejos.

Víctor Blastón Alonso considera que el punto de vista del alumno no debe abandonar nunca la visión de un director, porque son ellos el centro de cualquier acción educativo.

El CEIP Asturias es un colegio familiar, situado en un barrio que está en la frontera del municipio; el centro educativo se convierte en un lugar de encuentro, como una gran plaza, donde cualquiera, independientemente de su situación personal, económica o social, tiene un espacio y puede compartir sus experiencias más profundas.

Bastón considera que «tiene suerte» porque el grupo humano que le rodea le ayuda a sobrellevar la soledad que implica la responsabilidad de dirigir el centro educativo. Yo creo que no es cuestión de azar. Considero que es la valía personal la que provoca sinergias para que todos se sientan parte del proyecto.

Los equipos directivos han sido capaces de gestionar una coyuntura compleja en estos últimos años, gestionando una problemática con múltiples factores de riesgos, cuidando de aspectos para los que nadie estaba preparado. Por todo esto, debemos sentirnos agradecidos. Esto no hubiese sido posible sin compañeros como Víctor Bastón Alonso: la humildad es un buen aliado, la alegría un socio imprescindible.

Esta es la entrevista que le hicimos:

17 mar 2022

Tatiana González, la tejedora de redes

Esta sección que retomamos se nutre de las conversaciones que mantenemos con cada uno de ellos y que ponemos a disposición de todos ustedes para que puedan leerlo y escucharlo. El podcast se sigue titulando de la misma manera: «Educamos Juntos», porque creemos firmemente que somos mejores si compartimos los proyectos y nuestras ideas son más grandes y efectivas cuando crecen al amparo del trabajo en equipo.

Están impulsados por la Fundación Lidia García, que trabaja con el objeto de poner a diferentes generaciones a trabajar juntos. Por eso nos parecía oportuno empezar esta nueva serie con Tatiana González Robaina.

Ella es trabajadora social. Yo siempre he creído en la educación que llamamos no formal, la que sucede fuera de los ámbitos institucionales, es esencial, porque proporciona espacios de desarrollos más libres.

La conversación se deslizaba con el murmullo de los niños y niñas de la Escuela Infantil Mafalda, en la recta de los Tarahales.

Tiene un trabajo maravilloso. Es hilandera. Crea redes entre las personas para que unos con otros sean mejores y se sientan protagonistas de su propia historia.

Su trabajo se centra en las personas. Lo tiene claro: «Tenemos que partir de las personas, de su ritmo, de sus peculiaridades, de sus necesidades, porque si no, no podemos construir nada, no podemos venir con nuestra cartera de servicio, si no escuchamos y no partimos desde el propio individuo entonces hay que darles valor a las personas, pero siempre trabajando en pro de construir redes».

En cualquier taller de costura se realizan puntos de remate para que las piezas queden bien unidas y sean resistentes. En nuestro trabajo, esos pespuntes somos nosotros, los educadores. Tatiana González representa a los que seguimos creyendo que, por encima de cualquier estructura formal o no, la persona es el centro de nuestras acciones.

Te invito a escuchar la entrevista completa, con la que iniciamos, como comenté antes, esta nueva temporada, donde los educadores son sus protagonistas.

 

6 jun 2021

Cuando la responsabilidad de ser directora te hace feliz

Los directores de los centros escolares juegan un papel fundamental en la dinamización de los centros educativos. Deben liderar la adaptación constante de la escuela a los cambios sociales. No es una tarea sencilla, pero sí gratificante.

Noemí Padrón, directora del CEIP Valencia, es una mujer decidida y pragmática, dedicada a la escuela pública y con un objetivo claro: que los niños sean felices.

La comunidad educativa trabaja para favorecer un clima de convivencia y respeto, atendiendo a la diversidad y potenciando la colaboración y participación de los padres y madres con el fin de contribuir a una mejora de la oferta educativa.

Considera que la dirección es una «responsabilidad grande pero es maravillosa, es una experiencia fantástica que yo no cambiaría por nada». La educación es una tarea muy compleja que requiere de eficacia y dedicación.

Sueles escuchar muchas cosas de las directoras, y pocas veces transmitir tanto entusiasmo por el cambio y la transformación.

«Cuando ves que las cosas empiezan a ir bien, es como si te tiraras en puenting». Para que esto suceda, es importante crear lazos y ser capaz de influir y de dinamizar al equipo, al alumnado y a la comunidad. Esta tarea es compleja, porque significa escuchar y proponer objetivos alcanzables y que motiven.

La felicidad de un docente llega cuando se da cuenta que su esfuerzo ha valido la pena. Es un momento muy emocionante, casi indescriptible, que solo experimentan aquellas personas que disfrutan con lo que hacen.

Tamaraceite debe sentirse orgulloso del CEIP Valencia. Sin duda, el centro educativo está contribuyendo al desarrollo del barrio y sus gentes.

Puedes escuchar la entrevista completa aquí:

https://www.spreaker.com/user/13677979/noemi-padro-n-cuando-la-responsabilidad

Artículo publicado en el https://www.diariodegrancanaria.com/

 

6 abr 2021

El rincón de Gianni Rodari, un espacio para la Biblioteca de Canarias

Gianni Rodari era un maestro, periodista, pedagogo, escritor, poeta… Una de sus técnicas más conocidas es el binomio fantástico.

El rincón de Gianni Rodari: Binomio Fantástico (Vídeo)

Gianni Rodari

Entre los docentes, familias y educadores es muy importante una de sus obras «Gramática de la fantasía», que publicó en 1973. El título me encanta, la verdad. Es tan intenso.

Por eso a este espacio le hemos llamado «El rincón de Gianni Rodari», y parafraseando al autor, «para los que creen que es necesario que la imaginación tenga su lugar en la educación y para quienes confía en la imaginación infantil, para quienes conoce el poder de liberación que puede tener la palabra».

Ten a mano un cuaderno y un lápiz, una tableta, un ordenador… lo que más se te apetezca para jugar con nosotros; siempre estamos aprendiendo a escribir, siempre hay algo nuevo que descubrir, nuestra imaginación siempre tiene algo que contar.

A lo mejor, después de estos 10 episodios, tienes muchas y nuevas ideas para escribir un libro de cuentos. ¿Te animas? ¿Te atreves?

Capítulo 1: El binomio fantástico

Una de las técnicas más famosas y utilizadas por Gianni Rodari y escritores, es el binomio fantástico.

Tengo que confesarles que yo, para entrenarme, suelo pedirle a los amigos y conocidos que me «regalen» dos palabras que luego tengo coloco en un relato o un texto.

Rodari llegó a escribir que una historia solo puede nacer de un binomio fantástico.  Pero deben de ser dos palabras alejadas, que poco tengan que ver una con otra.

Es verdad que un loro y un águila son dos palabras distintas, formadas por letras diferentes. Pero ambas son aves y vuelan y tiene pico… muchas cosas en común. 

Busquen palabras que poco tengan que ver una con otra. Palabras que estén distanciadas, que una sea extraña para la otra.

Podemos hacerlo al azar: abrir un diccionario por dos páginas diferentes y ver qué ocurre; preguntarles a dos amigos una palabra a cada uno…

Un ejemplo

Pensemos: farola y manzana.

A partir de esas dos palabras podemos hacer muchas asociaciones. Nos podemos ayudar de las preposiciones o de los artículos. 

Por ejemplo:

  • La farola y la manzana…
  • La manzana en la farola…
  • La manzana sobre la farola…
  • La farola de manzanas…

Y a partir de ahí, ya podemos empezar a escribir.

Se los voy a poner fácil para el primer binomio:

Piensen una palabra…. ¿Ya la tienen?

La mía es: marioneta

Pásenlo bien.
Sean felices.

ESTE ESPACIO ESTÁ IMPULSADO POR BIBLIOTECA DE CANARIAS

Biblioteca de Canarias y Animalec

 

26 mar 2021

«Unus pro omnibus, omnes pro uno», con Nicolás Tejera

Nicolás Tejera es un docente entusiasta, con capacidad de observación, sasisfecho de su trabajo, pero consciente de lo que aún le queda por aportar. Presume de ir feliz todos los días al centro, quizás por eso, sucede lo que sucede en el CEIP Los Tarahales.

Aunque el lema lo popularizó Alejandro Dumas en su novela «Los tres mosqueteros», ha resumido durante siglos los sentimientos y emociones de muchos grupos, comunidades e incluso países: es uno de los lemas nacionales de Suiza. Buscando una frase que pudiera resumir el diálogo con Nicolás Tejera, director del CEIP Los Tarahales, no encontré otra mejor que fuese: «Uno para todos, todos para uno».

Uno de los grandes retos de la educación es ofrecer estándares comunes que desarrollen todas las potencialidades del alumnado, pero también proporcionar una educación individualizada, con el fin compensar o prevenir las dificultades que puedan presentar los individuos a lo largo de su desarrollo.

Para Nicolás, una de las peculiaridades de su centro es la variedad de sus alumnos y alumnas, que provienen de diferentes entornos urbanos y rurales, produciéndose una mezcla de culturas que provocan una riqueza enorme.

«Valorando, escuchando y adaptándonos a las peticiones de nuestro alumnado y de nuestras familias» es una de las claves, según Tejera, para aprender «de las dificultades y de las potencialidades de cada uno».

El alumnado debe ser partícipe del cambio, porque deben «modificar aquello que nos les guste»; la colaboración con las entidades sociales, económicas y culturales del entorno son fundamentales para la formación del alumnado y «les preparamos para que ellos conozcan lo que está pasando en la sociedad», con espíritu crítico.

Las familias también son un pilar esencial en la construcción del proyecto educativo del CEIP Los Tarahales, con una asociación de madres y padres fuerte, para que todos sean parte activa, para que ellos crean «que pueden cambiar esta sociedad».

Uno de los proyectos de esta escuela pública, que vienen desarrollando con éxito desde hace algunos años, es la enseñanza de la lengua inglesa, participando en diversos proyectos europeos, con otros colegios del continente.

No te pierdas esta interesante entrevista y escúchala completa en este enlace: https://www.spreaker.com/user/13677979/nicolas-tejera

26 feb 2021

Cuando la pasión y la vocación son ingredientes necesarios

Encuentro con Cristel Iorio, directora del CEIP Pintor Néstor

El CEIP Pintor Néstor se encuentra en el barrio capitalino de Casablanca III. Ella que lo tiene claro: sin emociones no hay proyecto. «Para ser maestra tienes que vivirlo y tienes que sentirlo», nos comenta. 

El liderazgo auténtico conduce al equipo de tal manera que cada uno de lo mejor de sí mismo. Es capaz de detectar el pulso del entorno y marcar un ritmo auténtico y veraz, paciente y sincero. 

Cuando este se produce dentro del entorno educativo, además, hay que conjugar las creencias personales y los principios vitales con los objetivos de una comunidad, proceso necesario para actuar con coherencia y sensatez.

Creo en los procesos educativos que fomentan la participación y la inclusión, que buscan la excelencia educativa (entendida como la capacidad de dar lo mejor de uno mismo) y la transformación social.

 

Las palabras de la directora son claras y sencillas pero contundentes: «El equipo directivo viene de una zona con una realidad social bastante crudas. Desde ahí aprendimos y desarrollamos estrategias metodológicas donde primamos al alumno como SER, para luego adentrarnos en el ámbito curricular». «Lo tengo que llevar como un líder pedagógico y luego transmitir todo eso al equipo para convertirlos a ellos también en líderes que van a transmitir la emoción con la que sienten la educación».

Cristel Iorio, la maestra, ha descubierto en el proceso y el desarrollo de su actividad «cosas que ni siquiera sabía que existían», proporcionándole una enorme alegría, descubriendo «gente e historias que me han enriquecido».

En la conversación que mantuvimos afloraron términos como alegría, compromiso, transformación, pasión, emoción, valores, educación, currículum… Como ciudadano, uno se llena de esperanza, no porque esta sea lo último que se pierde, sino porque es lo primero que ganamos cuando nos encontramos con propuestas como estas.

 

7 oct 2020

De dinosaurios a seres luminiscentes: así es el profesorado de la era COVID-19


Artículo de opinión publicado en el Diario de Gran Canaria, el 08/09/2020.

«Los que saben hacer las cosas, las hacen; los que no saben, enseñan a hacerlas; los que no saben enseñar, enseñan a los que enseñan, y los que no saben enseñar a los que enseñan, se meten en política» (Muriel Barbery, 2006)

Parece ser que los docentes no somos tan dinosaurios y hemos sobrevivido; volvemos y estamos dispuestos a seguir manteniendo la escuela en pie, conscientes de nuestra labor educativa y social. Pero la Consejería de Educación ha pasado de buscar fósiles de dinosaurios a enviar a seres luminosos.

La autoridad educativa acaba de descubrir una subespecie de maestros y maestras. Docentes capaces de todo. De convertirse en psicólogos y pedagogos, en ingenieros y arquitectos, en gestores de comedores y doctores en nutrición, en diligentes gestores de los recursos humanos, en trabajadores sociales preocupados y ocupados por los demás, en administradores de fincas, en fabulosos técnicos en prevención de riesgos laborales y doctores en evacuación de edificios públicos y, ahora, en expertos en Covid-19: los equipos directivos.

Hombres y mujeres amparados hasta los dientes con toda clase de equipos de protección individual y poderes desconocidos hasta ahora. Conforman una particular Liga de la Justicia, superhéroes y heroínas que, bajo de la tutela institucional y sindical, han creado The Canary Teachers Academy.

Algunos son capaces de detectar la temperatura de cualquier ser vivo a metros de distancia. Otros, como esos canes que huelen estupefacientes y diversas sustancias prohibidas, olfatean virus y toda clase de enfermedades, provocando incluso aullidos y movimientos compulsivos alrededor del infectado.

Sé de algún miembro de algún equipo directivo que es capaz de visualizar las ondas de banda ancha que configuran las redes wifi y detectar errores, fugas y ataques al sistema informático, incluso antes de que se produzcan. Pueden, además, servir como repetidores de la señal, amplificándola por encima del estándar 802.11b. Sé, a ciencia cierta, que las grandes operadoras de telefonía y comunicación se están interesando por estos sujetos y ya se han puesto en contacto, a través de una incidencia, con la Consejería de Educación. Fuentes militares consultadas siguen también estas extrañas anomalías humanas, por si fuese necesario incorporarlas al servicio activo en algún momento.

Conozco a otros y otras que son capaces de traspasar con su mirada objetos sólidos, detectar fugas de aguas, intrusos indeseados, problemas estructurares… Los hay que tienen el poder de la bilocación, pudiendo estar en un aula resolviendo un conflicto, atendiendo al proveedor de geles hidroalcohólicos y hablando por teléfono a la vez.

¿Quién adivinó que, a siete días de las vacaciones oficiales, la Consejería de Educación divulgaría un protocolo a casi un mes y medio de empezar un curso escolar? ¿Quién supo de antemano que una vez empezado el curso surgirían planes de contingencias? ¿Quién conocía la existencia de un documento de más de cien páginas que se publicaría en medio del inicio de curso para prevenir el contagio de la enfermedad? Estos hombres y mujeres son todos clarividentes sin baraja, sin velas y sin cábalas. Demuestran un poder mental desmesurado, capaces de anticiparse a todo lo que llega.

No duermen. No comen. Viajan en el tiempo. Son diferentes, increíblemente fuertes y astutos, sigilosos y diligentes. Sabios y sabias. Controlan diferentes artes marciales, descodifican códigos ocultos en las cartas institucionales y dominan una decena de idiomas y las artes del protocolo, el C++, C#, Perl, Java, JavaScript e incluso el Haskell y ML.

Sus colegios son más grandes por dentro que por fuera. La materia se rinde y derrite ante ellos.

Pues siento decepciónales. No existen.

La gran mayoría son gente normal, con una alta dosis de locura y vocación, de pasión por la educación y compromiso social. Algunas tienen hijos e hijas y otros, parejas e incluso familiares octogenarios que también están a su cargo. Enferman, lloran, sonríen y se divierten. Se sienten solos y abandonados, pero también protegidos y acompañados por tantos compañeros y compañeras que comparten un disparate compulsivo por la escuela, más conocido como amor, que conforman grupos de convivencia estables que algunos llaman claustros y/o familia.

De poderes psíquicos nada. No tienen capa ni van pijama por las calles saltando de ventana en ventana, ni vuelan, ni se vuelven invisibles, aunque los traten como tal.

Son los equipos directivos, los nuevos iluminados, el guión perfecto para el programa «Crónicas de San Borondón» o el argumento ideal para el nuevo libro de Iker Jiménez.

Querida maestra


Artículo de opinión publicado en el Diario de Gran Canaria

La nota llegó diez años después de que dejara de ser su alumno. La acompañaba con un sencillo ramo de flores y una caja de frutas. Nunca esperó nada. Es verdad que sonrió cuando la leyó y su corazón le dio un pequeño vuelco. Pero nadie se dio cuenta. “Gracias por haber sido mi maestra”, susurró tímidamente.

En unos días muchos docentes recibirán a los alumnos y alumnas de la misma manera, sin esperar ninguna nota. No solo es un trabajo, también es una manera de entender la vida, de entender las relaciones, de comprender el mundo, de analizar todo que nos rodea y ponerle un nombre para que otros lo puedan comprender.

Es una gran responsabilidad porque sabemos lo que nos jugamos todos. Por eso nos duele tanto que muchos responsables de las políticas educativas nos traten con tanto desprecio. ¿Se acuerdan del juego “¡Huevo, araña, puño, caña!”? Tengo la sensación de que en el equipo de abajo siempre estamos los mismos, esperando y viendo caer la que se nos viene encima.

Me he imagino escribiéndole una carta a mi maestro. Me lo he imaginado colocándose las gafas de cerca y balbuceando cada una de mis palabras.

Creo que le daría las gracias por el tiempo que me dedicó, por lo valiente que tuvo que ser para contarle a mis padres lo que él creía y pensaba de mí. Le agradecería aquellas palabras que no entendí pero que con el tiempo cobraron sentido, las horas de trabajo que no vi, los exámenes de conciencia, las reflexiones profundas antes de tomar una decisión, los momentos buscando recursos y las lágrimas que en silencio derramó, porque le pudo la frustración.

Le daría las gracias por aquella canción que me hizo copiar. O por las interminables caligrafías y hojas repletas de operaciones. También por los chistes que contaba.

Ahora con el tiempo me he dado cuenta que se dejaba engañar, que en ocasiones miraba para el otro lado, que nos dejó equivocarnos, caernos y resolver entre nosotros las diferencias. Me di cuenta que siempre supo donde me escondí aquel recreo y que conocía al que rompió el libro que tenía unas fotografías de un hombre y una mujer desnudos. Quizás bastaría con darle las gracias por haber elegido la profesión que eligió.

No lo sé, la verdad.

14 abr 2020

Proyecto M.A.H.O.: ¡por nuestros mayores!

Hace tres cursos presentamos un proyecto a la Consejería de Educación, Proyecto MAHO, de educación intergeneracional. Queríamos proponer un desarrollo curricular, integrando diferentes generaciones, a través de tareas y aprendizajes basados en proyectos. Un ejemplo muy sencillo: nuestro alumnado preparaba clases de alfabetización digital y nuestros mayores nos enseñaban a cultivar. El CEP, la Inspección Educativa y Política Social nos prestaron su tiempo y atención y aportaron muchas ideas. Pero nunca supimos qué pasó luego… Silencio administrativo. Pero decidimos intentarlo, con nuestros medios. Al fin y al cabo la educación es eso, procurar proporcionar una respuesta vital al alumnado para que podamos integrarnos en nuestra sociedad y hacer que todo seamos más felices. Se lo merece el alumnado, nuestro pueblo de San Lorenzo y nosotros, como docentes. Al principio del camino conocimos a la Fundación Canaria Lidia García. Gracias a ellos hemos podido realizar muchísimas actividades. Han sido muy paciente con nosotros y conmigo… Me encantaría seguir profundizando en todo este trabajo, porque es muy humanizante, mucho, MUCHÍSIMO. Porque la soledad impuesta es la peor enfermedad. Porque algo se retuerce en lo más profundo cuando veo las noticias y escucho como tantas personas mayores están muriendo o sobreviviendo a esta situación. Porque no podemos despreciar tanto saber y tanta vida. La Fundación Canaria Lidia García ha editado un vídeo, hace un tiempo, que quiero compartir con todos ustedes. ¿A qué vale la pena?

4 abr 2020

Paleontología educativa. Incluye respuesta enviada desde el Gabinete de Comunicación.

No suelo utilizar las redes para contestar o vociferar. Lo evito a toda costa. Lo que me gusta es compartir cuentos e historias relacionadas con la literatura. Por cierto, esta tarde tendremos un cuento nuevo… Lo que tengo que decir lo digo personalmente cuando tengo la oportunidad para hacerlo. Pero como usted ha hecho estas declaraciones públicas, me gustaría responderle también de la manera más publica que yo tengo. Y por supuesto, no es desde el enfado, ni desde la discordia. Si lo desea, usted o su equipo sabe cómo localizarme y estoy encantado en trasmitirles propuestas concretas. Como director de un centro público, ya saben en dónde buscarme.

Quizás no es el momento de utilizar ciertos calificativos. Quizás hay ciertas comparaciones que no son del todo acertadas ahora. Yo buceaba, pero jamás se me ocurrió enseñarle a alguien hacerlo, a pesar de mi entusiasmo, mis ganas y que poseyera un equipo «a la última». Eso estaba reservado para los mejores y los que tuviesen más experiencias. A lo mejor, digo yo, tal vez ser un «dinosaurio» es intentar enseñarnos a bucear sin ser buceador o creyéndose que lo es. A lo mejor ser un «dinosaurio» es enviar unas instrucciones a las 15:00, un viernes. A lo mejor, y todo bajo mi ignorancia y desconocimiento de toda la realidad, ser un «dinosaurio» es tratar a todas las enseñanzas por igual, como si dar clases en Educación Infantil sea lo mismo que impartirlas en la Universidad. A lo mejor «dinosaurio» es darle mucha importancia a los «trámites burocráticos», a los informes y no sé qué papeles más en estos momentos, cuando lo que nos preocupan es la salud de nuestro pueblo y el bienestar emocional de nuestro alumnado, familias, vecinos, compañeros, amigos y familiares, y cómo nos va a afectar esta crisis a todos cuando acabe, porque acabará. A lo mejor es de otra época el desconcierto al que hemos estado sometido la comunidad escolar es este tiempo sin saber quién tenía el liderazgo de esta ESCUELA.

Quizás, a lo mejor, sea de la época de los dinosaurios que un 61% del alumnado de mi centro se conecte con un móvil, o que el 21% utilice redes 3G/4G para hacerlo, o que nunca, nunca, nunca, hayamos recibido una partida extraordinaria para tener los equipos al día en los centros escolares y que el dinero de mantenimiento de los mismos tenga que salir del mismo cajón con la que compramos el tan preciado, hoy en día, papel higiénico. A lo mejor veinticuatro equipos que están arrimados porque están obsoletos, los hubiera tenido al día, y se podían haber prestado, a ese 61% de alumnos y alumnas que intentan seguir las tareas a través de una pantalla de un móvil. Pero eso es ahora ciencia ficción.

Esto es nuevo para todos. Estamos aprendiendo día a día. Lo que a mí me ayuda es, por ejemplo, el amor de mis familiares y de mi pareja, un mensaje de calma y ánimo de mi inspector, el abrazo (imaginario, claro) de mis compañeros y compañeras a diario, las palabras de aliento de mis alumnos y alumnas, los esfuerzos de los compañeros y compañeras por seguir construyendo entre todos comunidad escolar y seguir dándole valor a la palabra ESCUELA, el constante apoyo y entusiasta de las familias, los compañeros y compañeras de otros equipos directivos, el apoyo de los compañeros de los CEP… todo esto, y más, conforman unas INSTRUCCIONES REALES y constantes, efectivas, sin victimismos y realistas.

Luego cuando venzamos a este virus que me está poniendo a prueba a diario, ya tendrá tiempo de localizar y señalar a los dinosaurios, que haberlos los hay, aquí y todos los lugares. Seguro que usted conoce a algunos y comparte mesa, mantel y carnet con ellos. A lo mejor, el dinosaurio soy yo, ¡vaya usted a saber!

Yo quiero ofrecerme. Soy el director del CEIP San Lorenzo, un colegio entrañable y pequeño, al que llegué llorando y cuando me vaya me iré de la misma manera. Y me gustaría que contara con nosotros, con los directores y directoras, que estamos hablando con las familias, intentado llegar a nuestro alumnado, animando a nuestros claustros. Nosotros cumpliremos con sus instrucciones, porque somos disciplinados y respetamos nuestro trabajo, pero no somos ilusos ni tenemos ningún complejo. Cuente con nosotros y con nosotras, no se imagina la cantidad de profesionales buenos que hay. Las grandes ideas que están surgiendo a diario. La superación de muchos por hacer algo que jamás han hecho. No nos dé la espalda. Cuente con nosotros y nosotras.

Aquí hay mucha gente que se está jugando su salud en los hospitales, en los supermercados, en las calles… Gente que se siente sola, que está en sus casa solos, que viven y duermen con sus peores enemigos, gente que está rumiando en sus casas cómo reinventarse cuando todo pase, gente enferma que tiene miedo de ir a un hospital, familias separadas, familias sin trabajo… y nosotros LA ESCUELA, los que amamos esta maravillosa y extraordinaria profesión, sabemos la responsabilidad que tenemos, ahora más que nunca.

Vamos a poner en valor lo que estamos haciendo, que ya habrá tiempo de dedicarnos a la paleontología y, entre todos y todas, con más DIÁLOGO que nunca, hacer que nuestra ESCUELA, sea la mejor que podamos tener, por el bien de todos y todas.

Si no le importa, voy a grabar el cuento de hoy, que sé que lo están esperando…


Respuesta enviada por la Oficina de Relaciones con los Medios de Comunicación Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes. Gobierno de Canarias».

«Estimado Daniel.

Mi nombre es Sonnia Chinea, soy la jefa del área de Comunicación y Relaciones con los medios de la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias. Le escribo porque he tenido la oportunidad de acceder a su blog y a una entrada en Facebook donde recoge la impresión de pantalla de un post publicado por la Cadena Cope que ha generado comentarios de todo tipo, algunos atacando a la actual titular de este departamento, María José Guerra Palmero, que me veo en la obligación de aclarar.

Usted no tiene por qué saberlo, pero el contenido de la publicación que se ha viralizado en ese pantallazo que adjunta a un texto con su firma, es rotundamente falso. Hay dos titulares y ninguno se corresponde con las declaraciones realizadas por la consejera el pasado viernes en una entrevista concedida a esta emisora.

Tal es así que, si usted acude a la página de Facebook de Cope Canarias ahora a buscar ese mismo post, no lo encontrará porque han rectificado reelaborando el contenido. Y a petición de esta que le escribe, este lunes, 6 de abril, se realizará -a partir de las 7,15h- y en la misma emisora, otra entrevista a la consejera con la intención de que, tanto el entrevistador como la Sra. Guerra Palmero, puedan explicar este desaguisado y que tenga esta última la posibilidad de aclarar los términos en que los que se pronunció.

Tenemos el sonido de esa entrevista, pero convendrá conmigo que a estas alturas, parece imposible parar un fenómeno que tiene como base de propagación un post con un contenido que es una imagen fija que, para decirlo abierta y francamente, es una información falsa.

La consejera en ningún momento dio por terminadas las clases, entre otras cosas, porque no se ha tomado esa decisión y en segundo lugar, tampoco llamó «dinosaurios» a aquellos compañeros y compañeras (ella también es docente) que no estuviesen al día con las nuevas tecnologías. Habló del asunto en el marco de las universidades (no del resto de niveles educativos) y siempre desde la perspectiva de que, de ser así, de existir alguien sin las destrezas digitales necesarias, sería algo anecdótico.

Lo que ocurrió es muy simple: el periodista tituló, de forma tremendamente sesgada, dos informaciones que están generando un daño francamente innecesario. De ahí la petición de rectificación a la cadena.

Se lo traslado para que sepa cuál es la situación dado que su post en las redes sociales o su entrada en el blog ha generado decenas de reacciones y para que, si lo tiene a bien, haga las apreciaciones que estime conveniente. Soy conocedora de que, obviamente, no podía usted estar al tanto de estas cuitas mediáticas, pero en un tiempo que nos exige a todos y todas responsabilidad y sosiego en las intervenciones o gestiones que realizamos, le solicito amablemente, ahora que conoce lo ocurrido, que aclare la situación que ha provocado un texto que, por toda fuente, tiene un contenido falso publicado por un medio de comunicación. Le paso el enlace de la información ya modificada de la Cadena Cope en su perfil de Facebook para que haga las comprobaciones que estime.

Sin otro particular, quiero agradecerle la atención prestada. Me tiene a su disposición para cualquier consulta o dato que necesite aclarar o ampliar.

https://www.cope.es/emisoras/canarias/santa-cruz-de-tenerife/tenerife/noticias/opcion-alargar-curso-hasta-julio-queda-descartada-20200403_668029?fbclid=IwAR1Q1h6Z2H0gQGSfPwW9uLBPjjY5p9xdWvNwl1vM2I0KBNAtwuG4ze3Z9BM

Un saludo cordial.

 

1 sept 2019

Educar con educación.


Hace poco nos enterábamos por un correo electrónico, que él mismo escribió, el cese de Julio López. Los aires del cambio han entrado como un vendaval en la nueva Consejería; es lo que tiene el progreso.

Si no estás relacionado con la educación, puede parecerte extraño que las cuentas de los colegios y la gestión económica de un servicio como el comedor, que presta una empresa privada, lo realice un docente, que obtuvo su plaza en una oposición para ser maestro. Pero son cosas que ocurren en esta Comunidad Autónoma y en este país, que de santo cada vez tiene menos.

Así que en muchas ocasiones, cuando la gestión económica se complicaba o simplemente no sabíamos cómo proceder, cogíamos el teléfono o enviábamos un correo a Julio López. Yo llevo 22 años como trabajador de esta Consejería; con él había hablado en muchas ocasiones, aunque lo conocí en persona hace unos años. Siempre obtuve una respuesta. Siempre. Siempre una palabra amable. Siempre un “no te preocupes” o “me acerco por el centro y lo arreglamos”. Siempre dispuesto. Siempre preocupado. Siempre con soluciones.

Por eso, aunque entiendo que los cambios son necesarios y es necesario renovar los servicios, creo que Julio, medalla Viera y Clavijo por su bien hacer profesional,como tal vez otros compañeros y compañeras, no se merecía acabar así. Yo creía que Educación era diferente. Creía que nosotros entendemos esto como una manera de actuar y de ver la vida. Pero a mi, personalmente, no me han gustado las formas. Al “Pacto de las Flores”, en educación, ya se le ha marchitado una.

Yo solo espero, y estoy seguro de ello, que quien ocupe su lugar tenga la misma predisposición de facilitarnos el trabajo, para así dedicarnos a los que más nos gusta: enseñar.

30 ago 2018

Los Invencibles, “lucharán” en Mogán, por los derechos de los animales.

¡Qué alegría! «Los Invencibles en la Operación Palomo», (Publicaciones Bilenio) ayudará al alumnado a reflexionar sobre la tenencia responsable de animales.

La Concejalía de Sanidad del Ayuntamiento de Mogán (Gran Canaria) va a realizar una campaña entre los alumnos y alumnas de Educación Primaria sobre la tenencia responsable de animales. El objetivo es que el alumnado reflexione sobre la responsabilidad que significa tener una mascota en casa.

Y para provocar el diálogo y generar opiniones al respecto, que mejor manera que la lectura de «Los Invencibles en la Operación Palomo», una novela donde un grupo de animales se ayudan entre ellos para librarse de sus dueños.

La historia jamás contada de una tuátara, un gato, un perro, un hámster, un periquito y un par de palomos, llegará a las aulas durante el primer trimestre del curso que comienza en breve.

Los libros y las historias que contienen, siguen siendo un elemento valiosísimo para la educación de los niños y niñas, la reflexión y la educación emocional. Por eso nos alegramos tanto en que confíen en nuestra novela para potenciar la responsabilidad y el compromiso que supone la decisión de tener un animal en casa.

31 ago 2017

Comenzamos un nuevo curso... Y sí, acaban mis merecidas vacaciones.

Estuve unos años fuera de la dinámica de un colegio. Luego estuve un año trabajando en los servicios centrales de la Consejería de Educación, en la Dirección Territorial. Renuncié a ese puesto y quise reincorporarme al aula. Lo necesitaba. Soy maestro. Unos meses de jefe de estudios en un centro y el resto del año escolar de director de otro. Presenté proyecto junto a un equipo, y ahora tenemos cuatro años para desarrollarlo. En estos años fuera del aula he aprendido mucho. Aunque después del periplo, las cosas no han cambiado tan rápido como a uno le hubiese gustado. Me siento orgulloso de mi profesión. Creo que debería de estar mejor remunerada. Creo que deberíamos ser más exigentes con nuestra formación permanente. Creo que deberíamos de contar con mejores escuelas, con espacios más amplios y cuidados, con mejores instalaciones. Creo que se debería de revisar el sistema de acceso al cuerpo de maestro. Creo que se debería de hacer un seguimiento más exhaustivo con aquellos que no cumplen. Creo tantas cosas… Yo, como cualquiera que lleve un tiempo en esta profesión tendrá soluciones mágicas, aunque quizás muchas más reales que las que se puedan tomar desde un despacho.

Cuando estaba en los servicios centrales cobraba 300€ como complemento. Ahora no supero los 250€ como director. Y me merecía ese complemento, como se lo merecen los compañeros y compañeras que en la sombra ponen en marcha una maquinaria en donde intervienen miles y miles de personas, muchas de ellas menores. Donde cualquier decisión puede cambiar la vida de cientos de personas. Así que no me quejo de eso. Pero no tenía ni una responsabilidad, ni administrativa ni penal. En cambio, los docentes y los Equipos Directivos sí, y me resulta paradójico que cualquier compañero/a cobre menos corriendo más riesgos.

No quiero centrar mi reflexión de inicio de curso en un debate sobre los sueldos y complementos… Es un síntoma, como otro cualquiera, de cómo ponemos en valor una profesión maravillosa y extraordinaria, que requiere ser diferente y que se convierte en un hermoso compromiso social y personal. Sé que la administración actual está trabajando en un plan para poner en valía, en todos los ámbitos, el trabajo que realizamos.

Pero puedo contarles, porque me consta, que hay muchos profesionales ocupados todos los días en mejorar la situación. Algunos de ellos que trabajan en otros ámbitos educativos y otros que lo hacen desde un centro educativo. Puedo contarles que nos dará igual cómo vaya de rápido el Internet en las aulas, cómo está el material de educación física, cómo de actualizada esté la biblioteca…, porque un maestro o una maestra, los de verdad, se levantarán mañana con gusanos en el estómago, desilusionado porque se acaba lo bueno, pero emocionado por los nuevos retos, los nuevos proyectos, los nuevos alumnos y alumnas, las nuevas familias… Sé que mañana miles de maestros y maestras se levantarán orgullosos de serlo, con la cabeza bien alta, de haber elegido la mejor y más responsable profesión del mundo. Porque el futuro, gran parte de nuestro futuro, se juega una vez más en el patio de un colegio.

Y sí, acaban mis merecidas vacaciones.