
A los niños y a las niñas les interesa muchísimo cómo fue se escribió el libro. Sin revelar ninguna de las sorpresas del texto, les contaré que les propuse a un grupo de amigos y amigas que me dijeran en qué animal marino le gustaría convertirse. Y así fue como todos aparecieron en el libro… Un juego muy divertido, un reto que me impuse, que salió como salió…
Parece que a estos tres amigos les gustó como quedó, y después de muchos años, es la primera vez que me encuentro con esta sorpresa:
Espero, dentro de dos años, poder firmar en el hueco que queda abajo a la derecha.
Gracias al Colegio Brains Las Palmas por entender que los encuentros con los autores, humaniza la literatura.
¡Un abrazo de cuentos!
